Después de las navidades, la mayoría de nosotros empezamos el año con algún kilito de más. También es verdad que muchos planean empezar la operación bikini un mes antes de verano y perder un montón de kilos en tan solo unas semanas. Pues no. La operación bikini debe empezar ahora, con suficiente tiempo como para que tu cuerpo lo asimile y la pérdida de peso sea permanente, sino, harás como un yoyo y recuperarás todos los kilos, incluso alguno más.
Aunque en el blog me dedico a poner recetas deliciosas, y especialmente de postres y dulces muy apetecibles, he de decir que en la mayoría de los postres se los dejo a mis familiares y amigos, ya que sino estaría como una bola.
Os voy a dar unos cuantos trucos para volver a estar como antes de las fiestas para que os sintáis mejor y os veáis mejor en vuestro cuerpo.
Lo más importante es volver a recuperar un horario de comidas. Normalmente en las fiestas quedamos con amigos para cenas y comidas, la mayoría de ellas copiosas y no siempre coinciden con nuestros horarios habituales de comidas. El hecho de tener un horario de comidas, hace que nuestro metabolismo no se vea obligado a retener más grasas y líquidos que harán que engordemos.
La mejor forma de limpiar nuestro organismo es beber mucha agua. De toda la vida nos han dicho que debemos beber dos litros de agua diaria, y la mayoría de la gente no lo cumple. Puede resultar aveces excesivo, ya que depende de la cantidad de actividad física que realicemos a lo largo de día, o incluso de la temperatura que haga. El agua es el mejor desintoxicante que podemos tener, aunque tampoco debes pasarte, ya que el exceso tampoco es bueno. Para mantener una piel hidratada y un metabolismo activo debes beber al menos dos litros de agua al día. Para cambiar, puedes hacerte tés e infusiones, que no engordan y que son saciantes.
Huye de las bebidas azucaradas, con gas y alcohol. Es cierto que entre cenas y celebraciones, todos ingerimos una gran cantidad de azúcares a través de la bebida, ya sean refrescos, vinos, cervezas, cava, etc. Para algunos puede ser lo más difícil, especialmente para los adictos a la Coca-Cola como yo, pero es cierto que cuando lo dejas la diferencia se nota prácticamente al día siguiente.
Intenta hacer cenas más ligeras que no tengan un gran aporte calórico. Mientras menos calorías consumas antes de irte a dormir, mejor para tu organismo. A la hora de dormir es cuando más se asimilan las calorías, por lo que si consumes muchas, estas permanecerán en tu cuerpo durante bastante tiempo.
Por supuesto, el ejercicio no viene nada mal. Mucha gente se propone adelgazar tras las uvas, y una gran parte de estos acuden corriendo a un gimnasio con la esperanza de que pagando la matrícula los kilos comiences a desaparecer de la báscula por arte de magia. Pues no señores, eso es imposible. Lo importante no es pasar de 0 a 100 en un día y matarse en el gimnasio. Si lo que quieres es recuperar tu peso y mantenerlo, con caminar una hora diaria a un paso firme es más que suficiente. De esta forma activarás tu cuerpo y te sentirás lleno de energía.
Estos son pequeños trucos que todos podemos llevar a cabo. ¡Suerte con el nuevo año!